Uno a uno pudimos ver a Aki Hakala (bateria), Emppu Suhonen (guitarra), Eero Heinonen (bajo) y Lauri Ylönen (voz) tomando sus posiciones, entre los gritos de sus fans, arrancando de inmediato con “First Day Of My Life”, primer corte de su mundialmente famoso ‘Dead Letters’, seguido por “Guilty” e “In My Life”. El siguiente tema fue “No Fear” del brillante álbum de 2005 ‘Hide from the Sun’.

Directamente, los niveles de energía estaban fuera de la escala, y Lauri se movía libremente por el escenario con su voz tan fuerte como siempre. La banda se sentía unida y se complementaban muy bien. Emppu, la integrante más reciente de The Rasmus, mostró sus grandes dotes como guitarrista con sus ejecuciones y asombró a los asistentes, siendo totalmente una gran protagonista del show. 

El setlist de las canciones fue una gran mezcla equilibrada. Sus canciones más nuevas se equilibraron y encajaron muy bien con el material anterior, y todo tiene un sentido natural de evolución, no de revolución. De su nuevo disco pudimos escuchar “Fireflies” y “Live & Never Die” siendo interpretados en la primera parte del show.

The Rasmus sesión acústica.

The Rasmus también se dio el lujo de tocar algunas canciones en formato acústico como «Still Standing», «October & April», la cual es parte de su disco de grandes éxitos y que en esta ocasión permitió a Emppu demostrar que también es una buena cantante. Cualidad que cuál hizo estallar el teatro en ovaciones. Para terminar esta parte acústica sonó «Sophia» de su disco ‘Playboys’ de 1997.

Después de estas canciones en acústico, la guitarrista Emppu comenzó con los acordes de «Rise», una elección perfecta donde los poderosos riffs distorsionados respaldaron una interpretación vocal épica de Lauri, un número clásico de The Rasmus. Estuvo muy bien la forma en que construyeron el sonido y lo dejaron caer para permitir que la voz brille, pero luego, cuando vuelven a traer el ruido, Lauri simplemente eleva la voz por encima de ellos. El efecto es fascinante.

La verdadera magia se hizo con “Livin’ in a World Without You”, “F-F-F-Falling”, y por supuesto “In The Shadows”, donde Lauri pidió al público que haga los coros, cuando ya nadie podía contener sus emociones y parecía que nos transportábamos en tiempo y espacio hasta los lejanos 2000. Todo lo bueno tiene un fin y con “Funeral Song”, “Jezebel” y “Sail Away”, The Rasmus concluyó su concierto en Argentina. 

The Rasmus demostró que su música es definitivamente para todas las generaciones. La lista de canciones tradicionalmente incluyen canciones de todas las décadas de existencia de la banda. Su sonido es único e icónico, y parece eterno.

Fotógrafo: Carlos.

Cobertura: Facundo A.

Texto: Rockwheels.