A la madrugada es cuando encontramos los mejores conciertos en los festivales, el año pasado lo vivimos con The Prodigy en el Mad Cool y este año en el Primavera Sound fue con The Armed, que sin dudas en términos de espectáculo audaz y pura fuerza sonora se lo llevó la banda. El setlist estuvo abarcado por las canciones de sus dos últimos álbumes Perfect Saviors y ULTRAPOP. Los cantos y los gritos coexisten en canciones que provienen de diferentes estilos como el grindcore, industrial, D-beat, black metal y más.

Musicalmente The Armed te golpea con infinidad de subgéneros a la vez. La batería es una ametralladora que se desdibuja junto con los otros ritmos explosivos. Teclados, bajos, guitarras y computadoras portátiles se unen en unas paredes de sonidos tan fuertes que la guitarra generalmente queda absorbida por el ruido.

El punto aquí no es el individuo sino el todo. Su show en vivo eleva la operación de esta banda a un nivel completamente diferente. Es un grupo que realmente conecta mucho con su público, ya que la mitad de la banda (básicamente todos con un micrófono) estaba entre la multitud sembrando un caos alegre.

El colectivo de hardcore experimental de Detroit que funciona como un proyecto de arte multimedia pero que es en gran medida una banda real, presentó lo que seguramente será el set más salvaje y entretenido del festival. Fue un placer encontrarse con un concierto que se moviera en unas coordenadas tan distintas a las del resto del cartel.

Cobertura: Guillermo C.

Texto: Rockwheels