Los fans de Polaris se embarcaron en un viaje catártico el miércoles por la noche cuando se presentaron en la sala Razzmatazz 2 de Barcelona. Después de la trágica muerte de Ryan Siew, verlos tener la fuerza para continuar en su nombre es algo realmente hermoso.

De luto por la pérdida de su compañero de banda Ryan Siew, Polaris canalizó su vulnerabilidad en un conmovedor tributo al fallecido guitarrista, brindando a todos en su comunidad la oportunidad de rendir homenaje colectivamente.

El setlist de la noche prometía una fusión cautivadora de sus clásicas canciones y con temas de su último álbum, ‘Fatalism’. El setlist arrancó con “Harbinger”, “Nightmare”. “Hypermania” y “All of This Is Fleeting” fueron momentos cruciales que encendieron a la audiencia con una energía visceral. “Parasites”, “Consume” y “Landmine” también fueron los puntos culminantes del set, sin embargo, el pico emocional llegó durante “Martyr (Waves)”.

El final del set principal llegó con “Masochist” e “Inhumane”, dos temas poderosos que dejaron al público sin aliento y clamando por un bis. Naturalmente, Polaris regresó al escenario para un bis que tuvo un poderoso doblete con “Pray for Rain” y “The Remedy”. Estas melodías finales resonaron por todo el lugar, poniendo fin a una actuación que trascendió los límites de un concierto típico; fue una liberación catártica, una fuerza unificadora con su público.

Crónica: Guillermo C. por Rockwheels

Fotos: Guillermo C.