Muchos fans de Korn ya saben que cuando Jonathan Davis tenía 16 años, comenzó a trabajar como asistente forense, ayudando en la realización de autopsias. El trabajo resultó atractivo para Davis pero también traumatizante, como relató en una entrevista al medio Kerrang!.

«Me metí en esto porque me gustaban las películas de terror y todo tipo de mierda oscura. Fui a este curso de ocupación regional donde te enseñaban y, por supuesto, quería aprender a hacer autopsias, porque pensé que sería jodidamente genial, pero he aquí, no sabía que esto me iba a traumatizar durante mucho tiempo. En esa época me convertí en un hijo de puta realmente duro y sin emociones».

«Sentía estrés postraumático al ver bebés muertos y niños pequeños que habían muerto después de encontrar el alijo de drogas de sus padres; estas muertes que no debería haber visto a los 16 o 17 años. Tuve que hacer mucha terapia. Fue difícil hacer que las pesadillas desaparecieran, pero lo superé y me hizo apreciar la vida mucho más».

La canción «Pretty» específicamente fue escrita sobre un caso particular cuando Davis tenía 18 años, en el que llevaron a la oficina del forense a una niña de once meses que había sido violada y asesinada a golpes por su padre. El caso persiguió a Jonathan Davis hasta su edad adulta y escribió la canción en recuerdo de la niña que perdió la vida de una manera tan salvaje y sin sentido. La canción apareció en el tercer álbum de la banda, ‘Follow The Leader’.

Desde entonces, Jonathan Davis ha sido un ávido defensor de la concientización sobre la salud mental y ha trabajado para desestigmatizar las conversaciones sobre el tema. El cantante nunca ocultó sus luchas con la salud mental, la depresión y la ansiedad. Al final, esos problemas se convirtieron en una brutal adicción a las drogas, que finalmente pudo superar.

Jonathan Davis siguió intrigado en estos tipos de casos: en un momento de su vida fue coleccionista de recuerdos de asesinos en serie y  fue propietario del Volkswagen Bug de Ted Bundy. Según se informa, vendió la mayor parte de su colección cuando tuvo sus propios hijos porque no quería que estuvieran cerca de esas cosas.