La letra del clásico de Black Sabbath, “War Pigs”, puede sonar satánica, como el fuego profético del infierno que emana de las letras amenazadoras que mencionan masas negras y hechiceros, pero el verdadero significado de la canción a menudo se disfraza en sus analogías. «War Pigs» pretendía ser una canción de protesta, una que equiparaba el acto de guerra con todo lo malo.

«War Pigs» inicia el aclamado segundo lanzamiento de Black Sabbath, ‘Paranoid’, presentando el álbum con el siniestro zumbido de una guitarra, la inquietante calma antes de una avalancha aún más inquietante de sirenas antiaéreas y una ráfaga de golpes de batería.

Geezer Butler, quien escribió la canción, había comentado que el tema originalmente se llamaba Walpurgis. Tomó su nombre de la Noche de Walpurgis, que marca la víspera de la fiesta en honor a Santa Walpurga. También se cree que la noche provoca reuniones de brujas.

«Walpurgis es como la navidad para los satanistas», explicó el bajista. «Pero cuando lo llevamos a la compañía discográfica, pensaron que ‘Walpurgis’ sonaba demasiado satánico. Fue entonces cuando lo convertimos en ‘War Pigs’. Pero no cambiamos la letra porque ya estaba terminada».

La letra habla en contra de la guerra en un momento en que la guerra de Vietnam estaba en pleno apogeo. «Para mí, la guerra era el gran Satán», dijo Butler. «No se trataba de política ni de gobierno ni nada por el estilo. Fue malvado. Entonces estaba diciendo que los generales se reunieron en masas / como brujas en misas negras para hacer una analogía».

El bajista toma nota de las primeras líneas de la canción, comparando a los líderes militares con sus tropas con los nigromantes que se reúnen en manadas y llamándolos mentes malvadas que planean la destrucción / Hechicero de la construcción de la muerte, y continúa con sus analogías mientras luego recurre a imágenes devastadas por la guerra. En los campos los cuerpos arden / Mientras la máquina de guerra sigue girando / Muerte y odio a la humanidad / Envenenando sus mentes con lavado de cerebro… ¡Oh, Señor, sí!.

En el puente de la canción, se señala con el dedo a los políticos que perpetran la violencia, pero dejan que sus electores peleen la batalla. ¿Por qué deberían salir a pelear? la canción pregunta: Dejan ese papel a los pobres. La canción continúa y comenta que pronto se les acabará el tiempo que les queda para hacer la guerra sólo por diversión y tratar a las personas como peones de ajedrez. Espera hasta que llegue el día del juicio, advierte la canción.

«War Pigs» llega a su fin con el día del juicio final. Ahora en la oscuridad, el mundo deja de girar, suena la canción, Cenizas donde los cuerpos arden / No más cerdos de guerra tienen el poder / La mano de Dios ha dado la hora. Los cerdos de guerra quedan arrastrándose de rodillas y suplicando misericordia por sus pecados mientras Satanás se ríe y extiende sus alas.