Travis, una noche mágica en Barcelona

Barcelona, 29 de agosto de 2024. La noche del miércoles, la mítica sala Razzmatazz se convirtió en un viaje en el tiempo a través de los himnos de Travis. Con un sold out que hablaba por sí solo, los escoceses demostraron una vez más por qué son una de las bandas más queridas del indie rock.

Francis Healy, con su voz inconfundible, lideró a la banda formada por Andy Dunlop, Dougie Payne y Neil Primrose, la formación clásica, en un setlist que recorrió lo mejor de su discografía. Desde los clásicos como «Side», «Closer», «My Eyes» y «Home», la banda logró conectar con un público entregado que coreó cada una de las canciones. La autoría de las canciones de Travis ha evolucionado con el tiempo. Un momento especialmente emotivo fue cuando dedicaron varias canciones al hijo de Francis Healy. Se notaba el cariño y la conexión que existe entre el cantante y su público, creando una atmósfera íntima y especial. 

Durante el concierto, Francis Healy compartió con el público algunas reflexiones sobre la música de Travis. «Nuestra música os lleva a estados altos y también a estados bajos, pero siempre os acompañará», afirmó el vocalista.

El cierre del concierto fue apoteósico, con una emocionante interpretación de «Flowers in the Window». Pero la sorpresa llegó con un cover inesperado: ¡»Baby One More Time» de Britney Spears! El público enloqueció con esta versión rockera de un clásico del pop. Y para rematar la noche, sonaron los primeros acordes de «Why Does It Always Rain on Me?», desatando una euforia colectiva.

En definitiva, la noche del miércoles en Razzmatazz fue una experiencia inolvidable para todos los fans de Travis. La banda escocesa demostró una vez más por qué sigue siendo una referencia en el mundo del indie rock.

Travis nos presenta una paradoja musical: mientras sus canciones suelen ser melancólicas y reflexivas, sus conciertos son una explosión de energía y alegría, transformando la tristeza en una fiesta. Son un camaleón musical: capaz de pasar de las sombras más oscuras a los escenarios más luminosos. Sus canciones son un refugio para el alma, pero sus conciertos son una invitación a la celebración.

 

Crónica: Guillermo C.