El patrimonio del fallecido baterista de Slipknot, Joey Jordison, ha resuelto una demanda en curso contra la banda. Los herederos habían acusado al grupo de sacar provecho de la muerte del músico promocionando artículos que estaban en su posesión después de haber prometido en un documento legal devolver sus pertenencias.

La banda y el baterista se separaron en 2013 y Jordison murió en 2021 a la edad de 46 años. Pero antes de su fallecimiento, el Joey había llegado a un acuerdo con la banda en 2015 para comprar su participación en Slipknot Partnership. Según el acuerdo de liberación, Shawn Crahan y Corey Taylor debían devolver «cualquier propiedad, incluido el equipo o equipamiento musical, perteneciente a Jordison».

Como parte de la demanda, los abogados de Steamroller LLC que representaban al patrimonio de Jordison acusaron a la banda de sacar provecho de la muerte de Jordison, alegando que «al menos 22 artículos» no habían sido devueltos, incluidos «instrumentos musicales, equipo y vestuario». También alegaron que la banda incluyó algunos de los artículos de Jordison en el museo itinerante Knotfest, que era una atracción en sus diversos eventos del festival.

Tras su fallecimiento en 2021, su muerte fue recibida con cariño y sentidas condolencias por parte de músicos y fans, y Slipknot incluso lo honró con un apagón en las redes sociales.

La banda se había mantenido callada sobre hablar sobre Jordison, tal vez con la acción legal teniendo algo que ver con eso, pero recientemente el percusionista Shawn «Clown» Crahan expresó su agradecimiento por lo que Jordison había hecho en la banda e incluso habían contemplado la idea de que podrían haberse reunido.